
Si estás buscando un lugar único para disfrutar de buena cerveza en Madrid, no puedes dejar de visitar la Fábrica Maravillas, el único brewpub del centro. Ubicada en el número 29 de la calle Valverde, esta mini-fábrica que abrió sus puertas en 2012 se ha convertido en un auténtico lugar de peregrinaje para los amantes de la cerveza artesanal. No solo elaboran su propia cerveza, sino que también tienes la oportunidad de disfrutar de ricas tapas y raciones que acompañan perfectamente cualquier pinta.
Además, el ambiente en este local es simplemente genial. Puedes pasar un rato agradable con amigos mientras saboreas alguna de sus elaboraciones, y lo mejor es que aceptan tarjetas de crédito y cuentan con una buena capacidad para que todos puedan unirse a la fiesta. Los fines de semana, abre desde las 12:30h para que empieces el día con un buen aperitivo. Si quieres saber más o hacer una reserva, puedes llamarlos al 915 218 753 o visitar su página web en fmaravillas.com. ¡No esperes más y anímate a conocer la mejor cerveza de Malasaña!


Horarios Fábrica Maravillas - Cervecería
Día | Hora |
---|---|
lunes | 18:00–24:00 |
martes | 18:00–24:00 |
miércoles | 18:00–24:00 |
jueves | 18:00–24:00 |
viernes | 18:00–24:00 |
sábado | 12:00–24:00 |
domingo | 17:00–23:00 |
El horario podría cambiar.

Mapa Ubicación Fábrica Maravillas - Cervecería

Dónde se encuentra la Fábrica Maravillas en Madrid
¡Hey! Si estás buscando un lugar chulísimo para disfrutar de cervezas artesanales, tienes que visitar la Fábrica Maravillas. Este sitio está en la Calle de Valverde, 29, en pleno corazón del Centro de Madrid. La atmósfera es bastante relajada y, aunque en algunas ocasiones se llena hasta los topes, si tienes suerte, podrás disfrutarlo con tranquilidad. ¡Y ojo! No te sorprendas si al llegar encuentras un ambiente más tranquilo de lo habitual, ¡nos ha pasado!
Lo mejor de la Fábrica Maravillas es que puedes ver las entrañas de la artesanía cervecera, lo que le da todavía más encanto al lugar. La camarera que nos atendió fue increíblemente amable, ¡se notaba que le gusta lo que hace! Sin embargo, hay que ser sinceros: los precios pueden ser un poco altos, especialmente si te pones a pedir pinta tras pinta. Un par de cervezas artesanas pueden costarte casi 12 euros, así que tenlo en cuenta si vas con un grupo grande. Pero, a pesar de esto, las birras son bastante ricas, aunque hay que avisar que no todas las opciones estaban al mismo nivel.
Ahora, sobre la comida... ¡es un poco limitada! No esperes un menú extenso. Puedes disfrutar de unas aceitunas riquísimas pero no hay tapas, ni siquiera unos panchitos para picar. El foco aquí son las cervezas, y bueno, igual esto puede parecer un poco decepcionante si venías con hambre. Aunque varios clientes se han quejado de esto, lo que realmente importa es la experiencia general, que al final es muy positiva.
Así que, si te pasas por allí, ¡hazlo! La Fábrica Maravillas está situada en Calle de Valverde, 29, y aunque puede que encuentres otras cervecerías en la zona que hagan competencia, definitivamente es un sitio que merece tu visita. ¡No olvides probar su IPA que está espectacular!

Qué tipo de establecimiento es la Fábrica Maravillas
Y ya que estamos hablando de la Fábrica Maravillas, tengo que decirte que es un lugar astuto que te engancha con su cerveza artesanal. La variedad que tienen es increíble y hay de todo tipo, desde las más suaves hasta las más contundentes, ideal para todos los paladares. ¡No te puedes perder la Malasaña APA y la Flipa! De verdad, son un clásico que no falla. Y aunque el precio puede ser un poquito más alto en comparación con otras cervezas, entre 10 y 20€ por persona no está nada mal para lo que ofrecen.
El ambiente es otro punto a destacar; es tranquilo y acogedor, perfecto para relajarte con amigos y disfrutar de un par de cañas después del trabajo o en plan tapa. Ah, y no olvides probar el queso al aceite y el exquisito pan que mencionan todos. Se nota que están por el buen camino, aunque, bueno, hay quien dice que la limpieza podría mejorar un poco. Pero en general, entre la buena cerveza y las tapas, te aseguro que la experiencia es muy recomendable.
Claro, no todo ha sido perfecto, y algunos han comentado que la forma en que sirven podría ser mejor. Con eso de que a veces hay demasiada espuma y las medias pintas pueden quedarse cortas. Pero mira, si te gusta la idea de ir a un lugar donde la cerveza artesanal se hace en casa y hay buena onda, este es el sitio. Además, podrían poner algo de música de fondo para amenizar, pero bueno, ¡pequeños detalles que siempre se pueden mejorar!
Así que, para resumir, la Fábrica Maravillas es una cervecería moderna con un toque especial. Con su propia fábrica artesanal a la vista y una selección de cervezas increíbles y tapas riquísimas, es ideal para pasar un buen rato. La amabilidad del personal también suma, y puedes ir a experimentar esta buena vibra que tienen. ¡Definitivamente volveré para seguir probando esas cervezas!

Desde cuándo está abierta la Fábrica Maravillas
Así que, después de haber escuchado tantas opiniones sobre Fábrica Maravillas, decidimos darle una oportunidad. La verdad es que nuestras expectativas estaban altas, pero después de ir, la experiencia fue todo un reto, la verdad. Las cervezas artesanales que ofrecen... bueno, no fue lo mejor que hemos probado. Pedimos una ronda y, sinceramente, no nos impresionó en absoluto. Para ser artesanales, sabe a poco, como si las hubieran olvidado en un rincón. Además, el precio no ayuda; más de 5€ la pinta y ni siquiera bien ejecutadas. Una decepción que no se compensa con lo que esperábamos.
La camarera que nos tocó fue también parte de la experiencia que nos dejó un mal sabor de boca. No solo parecía estar en otra dimensión, riéndose con sus amigas en lugar de atendernos, sino que además me dio la sensación de estar “importunándola” al hacerle un pedido. No sé tú, pero eso no es lo que busco en un local de este tipo. Y no me hagas empezar con el olor al entrar: ¡horrible! Con todo esto, puedo decir que el servicio fue un 1, y el ambiente, otro tanto. Así que bien, gracias, pero no repetiremos.
En otra ocasión, algún amigo mencionó que el sitio había cerrado, lo cual dejó a más de uno con la pregunta de '¿y ahora dónde vamos a beber buena cerveza?'. Supongo que los altibajos son parte del juego en la scene de cervezas artesanales. Sin embargo, el 19/10/2024, por lo que dicen, Fábrica Maravillas todavía estaba en pie, y recuerdo que alguien disfrutó de su cerveza negra, aunque a nosotros, con la experiencia anterior, no nos animó demasiado.
Ahora, entre cuentos y comentarios de otros, hemos escuchado que en sus días de gloria tenían una amplia variedad de cervezas, que incluso podías ver cómo las fabricaban a través de esas paredes de cristal. Pero parece que el lugar ya no está a la altura de lo que fue. Y no es solo eso, sino que en uno de los relatos que escuchamos, mencionaron que incluso habían levantado a unos clientes de la mesa de forma rude y un tanto mezquina, lo cual no habla muy bien de su atención.
Así que ya ves, la Fábrica Maravillas podría haber tenido mejores días. Aparentemente, si la memoria no me falla, según algunas voces, este lugar abrió sus puertas hace varios años, pero como misterio urbano, se menciona que ya no es lo que solía ser. ¿Desde cuándo estará abierta? La verdad no lo tengo claro, pero teniendo en cuenta los comentarios, parece ser que su chispa se ha ido apagando con el tiempo. Una pena, porque lo que comenzó como algo prometedor ha terminado siendo solo un eco de lo que fue.

Qué tipo de cerveza se elabora en la Fábrica Maravillas
Y hablando de planazos, la Fábrica Maravillas en C. de Valverde 29 es uno de esos sitios que no puedes dejar de visitar si eres amante de la cerveza artesanal. Tiene ese aire auténtico que solo se siente cuando puedes ver cómo se hace la cerveza. La experiencia de estar justo donde se elabora y sentir ese ambiente es increíble. ¡Además, la variedad de cervezas que ofrecen es impresionante! Desde American Pale Ales hasta sours, seguro que hay algo para todos los gustos.
El lugar en sí es algo pequeño, así que puede llenarse rápidamente, pero eso no le quita su encanto. ¡Al contrario! Siempre está lleno de gente disfrutando de su buena limonada de cerveza. Y otra cosa que me encanta es que, cada vez que pides una cerveza, te la sirven acompañada de aceitunas o kikos, un detallazo que te hace sentir como en casa. Si te decides a ir, no olvido recomendarte probar la Malasaña, es una de mis favoritas y, según dicen, ¡tampoco puedes perderte la American Pale Ale!
Y sí, hay algo que criticar, como la decoración y el ambiente del local. A veces, la luz puede ser demasiado blanca y la música brilla por su ausencia, lo que le da un aire un poco frío. Pero la calidad de sus cervezas artesanales compensa cualquier inconveniente. Solo imagínate disfrutar de una ronda con los colegas mientras charlas y degustas cada trago.
En la Fábrica Maravillas, elaboran una variedad muy rica en cervezas, desde las tradicionales hasta las más innovadoras, así que tienes todo un recorrido para hacer. Te vas a encontrar con cervezas auténticas, creativas y con un sabor que, verás, se te queda en la memoria. ¡No te lo pierdas si quieres disfrutar de la mejor cultura cervecera en Madrid!

Se pueden degustar tapas junto con la cerveza en la Fábrica Maravillas
La Fábrica Maravillas en C. de Valverde, 29, realmente te ofrece una experiencia bastante interesante. Me acuerdo que cuando entré, la primera impresión fue un poco fría, quizás le faltaba ese toque acogedor que buscas en un bar. Aunque, para ser justos, el enfoque está en las cervezas, y deja que te cuente, ¡los tres tipos que probé no decepcionaron! La WAM, por ejemplo, es una APA buenísima con un cuerpo y espuma que la hacen destacar. Tenía un sabor intenso que me hizo sonreír. La FLIPA, una IPA que tiene más graduación que la WAM, no cumplió del todo mis expectativas; era como si le faltara lo que esperas de una buena IPA. Aun así, la kbrona (sí, así la llamamos para evitar problemas con el algoritmo) me dio una sorpresa agradable con ese toque sour que no veía venir. Aunque le faltaba un poco de cuerpo para mí, tenía un no sé qué que la hacía disfrutar.
Eso sí, tengo que admitir que el local se siente un poco desaprovechado. Con el espacio que tienen, podrían hacer algo más acogedor y, sinceramente, un par de tapas para acompañar esas cervezas no estarían nada mal. Me sorprendió que no tuvieran ni una simple tapa a mano; un par de cacahuetes o algo similar podría haber alegrado la experiencia. Además, el ambiente era un poco sobrio y le faltaba un poco de música de fondo que permitiera mantener una conversación sin esfuerzo. Me quedó esa sensación de que, si lo mejoran un poco, pueden conseguir un lugar más atractivo.
En cuanto al servicio, tuve un pequeño malentendido con la camarera al pedir la segunda ronda. Al parecer, entendió mal y la forma en que respondió no ayudó mucho a suavizar la situación. A veces las cosas pasan, pero si le ponen un poco más de ganas, sería genial.
Y bueno, para responder a la pregunta del millón: ¿Se pueden degustar tapas junto con la cerveza en la Fábrica Maravillas? Lamentablemente, parece que no, al menos no en mi visita. El espacio podría beneficiarse de unas buenas opciones de comida que complementen la bebida, ya que con la calidad que tienen en la cerveza, unas tapas estarían de lujo. Espero que tomen nota y hagan algún cambio, porque realmente tienen potencial. ¡Quizá les dé otra oportunidad más adelante!

Cuál es el ambiente del local en la Fábrica Maravillas
Y hablando de Fábrica Maravillas, ¡qué joyita de brewpub en el centro de Madrid! Si te gusta la cerveza artesanal, tienes que hacerte un hueco en tu agenda para probar sus creaciones. Imagina esto: nueve grifos con cervezas frescas y sabrosas que cambian según la temporada. Es como un festival de sabores donde siempre hay algo nuevo para descubrir. ¿Te imaginas disfrutar de una ipa intensa después de un día de trabajo? Hablando de la Flipa, si eres fan de las IPAs, no puedes dejar de pedirla. Tiene ese sabor increíble que te deja con ganas de más.
Y, la verdad, la atención que recibes aquí es de primera. Los propietarios son súper amables y siempre están dispuestos a ayudarte a elegir la mejor opción según tus gustos. Sin embargo, a veces el ambiente puede ser un poco tranquilo, y es que hay momentos en los que el silencio se siente un poco raro, sobre todo en un viernes por la noche. Un poco de música ayudaría a darle vida a la situación, ¿no crees? Es lo único que se puede mejorar, porque todo lo demás es genial.
Otra cosa que me encanta es la experiencia de hacer una cata de cervezas artesanales. Aunque la carta de raciones es algo limitada, con embutidos y quesos, siempre te llevan algún aperitivo con la bebida, lo cual es un puntazo. No obstante, ten en cuenta que el local no es muy grande y puede llenarse rápidamente. En alguna que otra ocasión, he tenido que beber de pie entre la multitud, pero fuera de eso, la experiencia sigue siendo muy recomendable.
En cuanto al ambiente del local, la Fábrica Maravillas tiene un encanto particular que se siente acogedor, pero, como mencioné, puede que sientas un poco de aglomeración si el lugar está a tope. La mayoría de las veces lo verás lleno de gente disfrutando de sus cervezas, lo que le da un aire vibrante y social, aunque a veces puede ser un poco incómodo. Así que si buscas un sitio para relajarte y disfrutar de buena cerveza en buena compañía, ¡no dudes en pasar por ahí!

Aceptan pagos con tarjetas de crédito en Fábrica Maravillas
Y hablando de experiencias, Fábrica Maravillas fue todo un hallazgo. Lo encontramos por pura casualidad un día que paseábamos por el centro y, la verdad, ¡menuda joya! Este lugar tiene una vibra increíble, además de ser un sitio pequeño pero muy acogedor. Ya desde que entras, te das cuenta de que el ambiente es especial: las cervezas artesanas están por todas partes, y hay una especie de energía creativa que te atrapa.
Lo mejor fue lo de las degustaciones. Te ofrecen probar varias cervezas antes de decidirte, ¡como un pequeño festín de sabores! Cada una tiene su propia personalidad, y el personal está superpuesto a ayudar. Se nota que realmente saben lo que hacen. Nos pasamos un buen rato charlando con ellos, quienes nos recomendaron cervezas según nuestros gustos. Tienen una forma tan cercana de atender que te sientes como en casa. Y si eres un aventurero, ¡puedes pedir una de cada y hacerte un tour de sabores cerveceros!
Aparte de la buena onda y las cervezas, hay algo que a mí me encantó: la fábrica que se ve detrás de la barra. Saber que estás disfrutando de una birra que han hecho justo ahí, a unos pasos de donde estás sentado, le añade un toque especial a la experiencia. La verdad es que si son fanáticos de la buena cerveza, no deberían dejar pasar la oportunidad de visitarlos.
Y a la hora de pagar, no te preocupes: aceptan pagos con tarjeta de crédito. Así que no tienes excusa para no ir. Lo único que tienes que hacer es llevar tu buen rollo y preparar tus papilas para un viaje cerverciero que no olvidarás. ¡Espero que vayan y lo disfruten tanto como nosotros!

Fotografías Fábrica Maravillas - Cervecería







