Cascada de los Colores

Cascada de los Colores

¡Hola, aventureros! Si estáis pensando en visitar la Cascada de los Colores en el Parque Nacional de la Caldera de Taburiente, tengo que advertiros: no esperéis ver un chorro espectacular de agua, porque, sinceramente, a veces la cascada puede lucir un poco más seca de lo que dicen las fotos. Pero no todo está perdido, ya que el sendero que os llevará hasta allí es súper fácil y, aunque no sea un monumento natural en sí, el lugar tiene unas vistas impresionantes y resalta por las tonalidades verdes, amarillas y anaranjadas que provoca la interacción del sol con los minerales. Es un paisaje que, en conjunto, merece la pena explorar.

El paseo hasta la cascada, que se sitúa a unos 500 metros del cruce con el Barranco del Almendro Amargo, no solo es una excusa perfecta para disfrutar de la naturaleza de La Palma, sino también para conocer un poco más sobre la historia del área. En los años 60, levantaron una pared para contener el agua; desde entonces, este rincón se ha transformado en un pequeño tesoro escondido donde los amantes de la naturaleza pueden disfrutar de un espectáculo de colores sin igual. Así que, ¿qué esperáis para hacer la mochila y salir a descubrirlo? ¡La aventura os espera!

Cascada de los Colores

Cascada de los Colores

Parque nacional
4
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Barranco Salto del Agua, Santa Cruz de Tenerife
Cascada de los Colores

Horarios Cascada de los Colores

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lunesAbierto 24 horas
martesAbierto 24 horas
miércolesAbierto 24 horas
juevesAbierto 24 horas
viernesAbierto 24 horas
sábadoAbierto 24 horas
domingoAbierto 24 horas

El horario podría cambiar.

Cascada de los Colores

Mapa Ubicación Cascada de los Colores

Cascada de los Colores

Cómo se puede llegar a la cascada de colores

¡Hola, aventureros! Si alguna vez han pensado en visitar la Cascada de los Colores en el Parque Nacional de Barranco Salto del Agua en Santa Cruz de Tenerife, les tengo algunas recomendaciones que podrían ser útiles. Primero que todo, les cuento que la ruta es un poco más larga de lo que se espera; la famosa 'ruta de 9 km' resulta ser en realidad 16 km de ida y vuelta, así que prepárense para una caminata seria, ¡pero muy bonita!

Ahora, hablando de la cascada en sí, no es tan impresionante como se muestra en las fotos turísticas. La cascada es como una pared, mucho más pequeña de lo que uno imagina, especialmente en época seca. Sin embargo, la ruta hacia ella es un verdadero espectáculo. Caminar por el barranco siguiendo el río, saltando sobre los cantos rodados, es todo un viaje. No olviden llevar calzado cómodo porque el terreno puede ser un poco traicionero. ¡Un buen par de botas de senderismo les salvará la vida!

Aunque a algunos les pueda desilusionar no ver ese gran caudal en tiempos secos, la belleza del trayecto supera al destino. Hay que admitirlo: el camino está súper bien señalizado y cada poco cruzan el río. El barranco es impresionante y, honestamente, pasarán más tiempo disfrutando del paisaje que de la cascada misma. Para que tengan una idea, mi grupo y yo calculamos que la ruta nos tomaría unas 5 horas con paradas para comer. ¿Y lo mejor? Admiten perros, aunque tengan en cuenta que hay avisos a su alrededor, probablemente porque el agua tiene un alto contenido de sulfatos o cal.

Así que si se preguntan cómo llegar a la Cascada de los Colores, la cosa es bastante sencilla. Desde el parking hay un sendero que inicia el recorrido de aproximadamente 5.5 km, lo que suma un total de 11 km de ida y vuelta. Mi consejo es que vayan en la mañana para no encontrarse regresando a oscuras, como nos pasó a nosotros. ¡Preparen sus mochilas y disfruten de la aventura!

Cascada de los Colores

Dónde está la cascada Salto Ángel

Y ya que estamos hablando de la Cascada de los Colores, tienes que saber que la magia de este lugar llega a su máximo esplendor en temporada de lluvias. Si la visitas en verano, puede que te lleves una decepción, pues ahí no verás nada de la belleza que tanto se habla. De noviembre a mayo es el periodo ideal, pero entre enero y abril es cuando todo se pone realmente espectacular. Febrero y marzo son los meses más recomendables, así que ya sabes: mejor prepara tu escapada para esos días. Además, un dato importante: las fotos que ves en internet pueden estar muy retocadas, así que ¡ve con expectativas realistas!

Una vez que te adentras en el camino, es genial desviar unos metros para llegar a la cascada. Comienzas en un angosto sendero donde te acompaña un riachuelo que va de un blanco brillante a un amarillo, y casi a rojo cuando te acercas a la cascada. Aunque no es una caída de agua enorme, con sus 5 metros de altura y los churretones de varios colores que ha ido formando el desgaste, te aseguro que tiene su propio encanto y es digno de una foto. La zona es perfecta para disfrutar del senderismo, así que tómate tu tiempo.

Si decides iniciar la caminata desde el mirador de los Brecitos, ¡no te arrepentirás! Es un recorrido que vale la pena y, además, tienes unos merenderos y zonas de acampada perfectas para hacer una pausa. El camino son unos 6.200 metros, lo puedes hacer en un par de horas si vas tranquilo, y además, en el camping hay un punto de información que te viene muy bien para orientarte. Y aquí va una advertencia: la pared de colores ha cambiado y ya no es tan imponente como en las fotos de internet, así que disfrútala por lo que es y no por lo que te han dicho.

Por cierto, respecto a la Cascada Salto Ángel, esa se encuentra en Venezuela, y no tiene nada que ver con nuestra colorida cascada de Barranco Salto del Agua en Santa Cruz de Tenerife. Aunque ambas tienen su encanto, la Salto Ángel es la caída de agua más alta del mundo, mientras que la nuestra es un espectáculo natural que brilla con sus colores. Así que si estás en Tenerife, no dudes en explorar este rincón lleno de magia. ¡A disfrutar de la naturaleza! ✨

Cascada de los Colores

Dónde se encuentra la Cascada de los Colores

Entonces, vamos al grano. La Cascada de los Colores no es cualquier cosa, en realidad es más como un lugar que te invita a hacer una escapada al aire libre en pleno corazón de la naturaleza. El sendero para llegar está de lujo; aunque, eso sí, se recomienda que te informen bien sobre qué camino tomar. Yo me recuerdo metiéndome por uno que cruzaba el barranco y, sinceramente, fue un reto. ¡Hay partes que vas a terminar con los pies mojados sí o sí! El agua y el sol a pleno rendimiento te pueden dejar sudando la gota gorda, pero ¡vale totalmente la pena! La cascada, aunque no sea la más espectacular del mundo, está bastante chula.

Y aquí viene lo interesante: en los últimos cinco años han tenido a la naturaleza un poco de sequía, así que el camino que antes estaba repleto de pequeños arroyos ahora es más bien un riachuelo tímido. Es una pena, la verdad, ver cómo el cambio climático nos está afectando incluso en esos rinconcitos mágicos. Lo que estaba lleno de vida ahora parece estar seco, y en ocasiones hasta te puedes encontrar con partes que tienen agua únicamente cuando hay cuatro valientes. Es un recordatorio de lo importante que es cuidar nuestro entorno.

La ruta para llegar es bien bonita, con unos 8 km de ida y unos poquitos menos de vuelta. Te puedes tomar un par de horas para disfrutar del paisaje, y aunque hay que estar atento a las marcas del sendero porque a veces son difíciles de ver, no tiene pérdida. El regreso por el cauce del barranco es como un pequeño paseo por la historia de cómo el agua ha dado forma a todo, con esas piedras que cuentan mil relatos. Si buscas un lugar que te saque un poco de la rutina y te regale un rato al aire libre, este es un sitio ideal.

Y, ya para que no te quede duda, la Cascada de los Colores está situada al fondo del barranco de las Angustias, dentro del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente, cerca de Santa Cruz de Tenerife. El acceso es fácil desde el aparcamiento al final de la LP-214 y la dificultad se puede catalogar como baja, ¡perfecto para un día de aventura sin tantas complicaciones! Así que, si tienes unas cuantas horas libres y ganas de caminar, ya sabes dónde dirigirte. ¡No te decepcionará!

Cascada de los Colores

Qué se puede esperar ver en la Cascada de los Colores

Y si te animas a visitar la Cascada de los Colores, prepárate para una ruta bien chula que vale la pena. Desde el parking donde dejas el coche, son unas dos horas y media caminando a paso tranquilo. La cosa empieza a ponerse bonita en el sendero, que recorre el barranco de las Angustias y es como un paseo por un cuadro natural. De verdad que el paisaje es espectacular, y aunque la cascada en sí no es muy alta (¡míseros 3 metros!), el entorno la hace especial y muy fotogénica.

Ahora, ojo con el camino, porque hay que estar atento a las señales. Alternarás tramos por el cauce del río y otros por montaña, así que lo mejor es llevar un poco de agua, comida y crema solar para esos momentos en que el sol se pone fuerte. No olvides que aquí estás en un barranco y puede haber riachuelos amarillos por el azufre, lo que añade un toque curioso a la caminata.

Después de todo, lo que realmente te va a sorprender son las vistas, más que la cascada misma. Si piensas en los colores y la belleza del paisaje, la experiencia vale su peso en oro, aunque algunos digan que la cascada en sí es "curiosa" pero nada del otro mundo. Así que guarda un espacio en tu lista de cosas por hacer en Tenerife y disfruta de la aventura, porque cada paso en el camino promete un espectáculo visual. En resumen, cuando llegues a la Cascada de los Colores, no te esperes una gran caída de agua, sino más bien un rincón mágico rodeado de naturaleza impresionante que, sin duda, merecerá tu visita.

Cascada de los Colores

Es recomendable visitar la Cascada de los Colores a pesar de que a veces puede estar seca

...Y hablando de aventuras, no puedo dejar de mencionar la Cascada de los Colores en el Parque Nacional de Barranco Salto del Agua. ¡Qué experiencia más maravillosa! Si te gusta el senderismo, te la recomiendo 100%. La ruta es un poco intensa, así que prepárate para caminar un buen rato. Después de unas 3 a 4 horas subiendo barranco arriba, por fin llegas a la cascada. Es un desafío, pero el esfuerzo vale la pena, sobre todo si planeas darte un chapuzón en el riachuelo que hay antes, que lleva más afluencia de agua. ¡Si puedes, no olvides meter la cabeza en el agua! Es simplemente espectacular.

Más allá de lo que puedas pensar, aunque la cascada se ve un poco pequeña o a veces no lleva mucha agua (me dijeron que en abril se veía un poco seca), es un sitio curioso y merece la pena visitarlo. Tiene su encanto ver cómo el agua va formando esos colores raros en las rocas a su paso. Tiene un vibe bastante mágico, aunque el nombre pueda sonar como algo de otro mundo. Es un antiguo dique en mitad de un angosto barranco, así que los distintos segmentos de roca adquieren un color diferente según la concentración de minerales. Eso es algo que a mí, al menos, me pareció muy interesante.

Ahora, si te decide con tu grupo de amigos o familia, asegúrate de ir con expectativas realistas. Lo digo porque algunos han comentado que puede decepcionarte un poco si esperas una cascada gigante. Así que mejor ve con baja expectativa y déjate llevar por lo curioso del lugar. La verdad es que a pesar de no estar siempre en su mejor momento, la experiencia de la caminata y de estar en un entorno tan bonito justamente lo hace más que recomendable. Si te gusta la naturaleza y la aventura, definitivamente no te lo puedes perder.

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Cómo es el sendero hacia la Cascada de los Colores

La verdad es que la ruta hacia la Cascada de los Colores es una pasada. Te adentras en un paisaje que parece de película, lleno de vegetación y vistas que quitan el aliento. Lo malo es que una vez que llegas a la cascada, sientes un leve bajón. Solo mide dos metros, así que no esperes un espectáculo grandioso. Pero, ¡oye!, la caminata y el entorno hacen que definitivamente valga la pena.

Ahora, no voy a mentirte: si estás pensando en hacer esta excursión desde la zona de acampada, mejor asegúrate de seguir bien las señales, porque están mal indicadas. Te puedes hacer un buen lío si no prestas atención, y como luego te quedes dando vueltas, puedes perder un rato precioso que podrías estar disfrutando en el sendero.

Ese día estaba todo increíble en cuanto a vistas, pero la cascada no tenía mucha agua. No te voy a mentir, eso desilusiona un poco. Y si te encuentras con familias haciendo picnic exacto en la zona de la cascada, como me pasó, es un poco moleta. Te apuntan a las rocas para buscar un lugar cómodo y piensas, “¿quién se atreve a mover piedras aquí?” Además, un par de valientes se metieron debajo de la cascada, en bañador, y no te quiero ni contar la escena. Si puedes, evita ir en fin de semana para no llevarte sorpresas y disfrutar más del lugar.

En resumen, el sendero hacia la Cascada de los Colores es bastante bonito. Es un recorrido que seguro disfrutarás, con naturaleza y tranquilidad, aunque la cascada no sea tan impresionante como esperabas. Así que prepárate para un buen paseo, pero no te olvides de las expectativas con la cascada en sí. ¡Una gran aventura al final del día!

Cascada de los Colores

Fotografías Cascada de los Colores

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